Ismael,
respecto de lo que dices de PRISA,
yo tengo la teoría conspiranóica,
(totalmente indemostrable,
y completamente infundada)
de que TODO el programa Escuela 2.0
no es más que una gran operación encubierta
para inyectar dinero en la maltrecha PRISA
y evitar su quiebra, por intereses mediáticos.
Comparto el interés en ofrecer alternativas constructivas. Pero no me
parece esa la aproximación para esta vez.
Mi impresión:
* se supone que reclamamos procedimientos legales de contratación.
Como ha apuntado Agustín. Si los requisitos ya están definidos
es muy fácil crear un pliego normalito.
* ir a quejarse del procedimiento de licitación para luego ir con
una contrapropuesta comercial, pues no sé, seré ingenuo... pero
no creo que ese sea el papel de una asociación sectorial
* por ejemplificar escenarios, pues, no sé, tal vez sí, pero creo
que en España hay sector de sobra para ofrecer soluciones
hard/soft/servicios en. Ni falta hace apelar al Santo
Shuttleworth y a la Santa Compaña, para ser comparsas ya tenemos
a los Iecisas, con los que al menos tenemos margen de lucirnos
como tecnólogos
* llegado el caso: Eva Almunia sí se merece un «zas, en toda la
boca» institucional comodiosmanda; lleva años haciendo méritos;
* más importante: dejar meridianamente claras las obligaciones del
estado con las TIC:
http://olea.org/conferencias/doc-conf-admonpublica-softlibre-rd/(6)
<http://olea.org/conferencias/doc-conf-admonpublica-softlibre-rd/%286%29>
y pq hay aproximaciones aceptables y otras inaceptables
* y dentro de las aceptables, que el estado debe asumir el motor
del I+D en el software al menos en lo que podemos llamar
«infraestructuras de la sociedad de la información para la
educación»
La ocasión amerita un repensado profundo de la educación pública. El
papel de las TIC no es circunstancial a la iniciativa de moda con
nombre 2.0, si no que es estructural (no sé cuánto, no se cómo, pero
sé que lo es). Si quieren terminar de prosperar la ridícula idea de
los portátiles, pues vale (ahí te doy la razón con lo de las
medallitas) y que lo liciten.
Si quieren de verdad crear la «Escuela 2.0» entonces ofrezcamos
nuestro interés en participar y apoyar iniciativas multidisciplinares,
ágiles, de riesgo económico acorde a los posibles licitantes. Podemos
proponer modelos en ese sentido. Pero que antes se interesen.
Además, también da mucha risa, pero quien debe estar ganando mśa con
todo este chollo de la Escuela 2.0 no es MS ni otras empresas de
software, y creo que ni las de hard por los márgenes, sino las
editoriales que consiguen perdurar el modelo del libro de texto
propietario. Cambiar el modelo de escuela debe pasar, sea como sea,
por la eliminación de esa burbuja, pero entonces ya sabes a quién te
enfrentarías: a PRISA.
Esto me lleva a una reflexión final: si sólo queremos ganar contratos,
a PRISA es a quien arrimarse. Si se quiere hacer algo más responsable,
serio y divertido los riesgos son enormes. El caso es que estamos en
una época de retos colosales (patentes software, reforma de la
legislación de IP, regeneración de la industria TIC, etc) y este es
otro de ellos.
No sé, creo que me he dispersado demasiado. Un abrazo.
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Ismael Olea
http://olea.org/diario/